Se hacía pasar por un personaje de la alta sociedad británica que estaba a punto de heredar una fortuna millonaria.[...] Gracias a su estilo elegante y su encanto a la hora de seducir a sus víctimas, consiguió que varias mujeres le prestaran dinero en efectivo "para sufragar los costes previos" a hacerse con la herencia. Aseguraba que no tenía dinero para pagar los abogados o las gestiones notariales, argumentos con los que logró estafar unos 700.000 euros.
Así de fácil... mujeres del mundo... mal, confiar caca... pero vamos, una cosa tengo segura... que aquí en Andalucía eso no hubiera pasado, hubiera sido algo así como:
1 comentario:
Qué pardillas las tías, eso les pasa por ambiciosas
Publicar un comentario